Un poco mas organizados, no muy relajados, pero por lo menos intentando día a día ver todo con mas tranquilidad.
Fueron días difíciles, pasaron rápido, siento que estos primeros meses del año “volaron”.
Fue duro para mi como Mamá aceptar lo que le estaba pasando, puedo decir que llore lo necesario para que esta angustia no doliera tanto. Para ser sincera creo que todavía no lo he conseguido y leer en su diagnóstico: TGD – Trastorno autista, fue muy duro, no encuentro las palabras para poder definir este dolor.
Estudios un montón, evaluaciones otras tantas, por suerte carpeta completa y fecha para la junta medica en el hospital y ahí esperar a ver si nos otorgan el “famoso certificado”, esa es la única manera que la medicina pre-paga cubra el 100% de todos los tratamientos que la gorda necesita para poder re-insertarse en este “mundo”.
Un mundo donde a los largo de estos días, me pregunte una y otra vez, si valía la pena tratar de llegar a entender.
Puertas que se cerraron de golpe, idas y venidas intentando encontrar un lugar para ella, mi hermosa hija que tiene todo el derecho del mundo como cualquier nena de dos años y siete meses a asistir a un jardín, pero como ella necesita ir con su maestra integradora, esto parece ser algo muy difícil.
Decepciones, re-planteos que todavía no tuve tiempo de hacer. Porque se imaginaran lo que tuve que correr para poder conseguir una vacante en pleno comienzo del ciclo escolar. Ya que en el jardin donde estaba anotada no la “Aceptaban” . Y si encima mandaba a la mierda a la Directora cuando me dijo directamente y bien clarito “este no es el colegio para tu HIJA”, doble problema hubiera tenido si además necesitaba encontrar una vacante para Tiago también.
Nuestra vida dio un giro de 180 grados, demasiados cambios juntos y muy movilizadotes, nunca creí que mi hija iba a enseñarme tanto. Amo a mi hija mas que nada en este mundo, Uno proyecta, desea, imagina… pero lo más importante que es sean felices. Y no tengo ninguna duda que es una nena FELIZ.
tal vez deberé aprender que la gorda necesitara retroceder un paso para avanzar dos, pero lo importante es que avance, ella no puede comunicarse, casi no tiene “Intención” y si a eso le sumamos un trastorno en el lenguaje, (algo muy común de encontrar en este tipo de cuadros) todo parece ser mas difícil de poder solucionar porque no solo NO puede hablar, sino que tampoco comprende lo que le decimos con palabras y se queda perdida dentro de "su mundo"
Tenemos por delante un gran trabajo, un equipo maravilloso que esta junto a ella y le enseñan día a día con mucho amor y paciencia como aprender a “ACEPTAR” este mundo, el tratamiento es intensivo y continuo, es de la única manera que se obtienen resultados. Vamos a la fonoaudiologa cuatro veces por semana y cinco veces por semana también tiene su terapeuta cognitivo conductual.
Algunas tardes la veo cansada, es una gran exigencia para ella, pero sabe que estamos los cuatro JUNTOS ayudándola a crecer, intentando que en unos años, esto sea un mal recuerdo y emocionándonos con cada logro, porque en estos dos meses de tratamiento aprendió a decir MA, PA y TAGO.
Así nos llama, así intenta comunicarse, así nos enseña que algunas cosas cuestan mas esfuerzo, pero cuando escucho esa vocecita tan dulce siento que no puedo estar triste, que no debo bajar los brazos y que tengo que luchar lo que sea necesario porque ella se lo merece, porque ser MAMA DE SIGAL es lo mas lindo que me paso en mi vida.
Fueron días difíciles, pasaron rápido, siento que estos primeros meses del año “volaron”.
Fue duro para mi como Mamá aceptar lo que le estaba pasando, puedo decir que llore lo necesario para que esta angustia no doliera tanto. Para ser sincera creo que todavía no lo he conseguido y leer en su diagnóstico: TGD – Trastorno autista, fue muy duro, no encuentro las palabras para poder definir este dolor.
Estudios un montón, evaluaciones otras tantas, por suerte carpeta completa y fecha para la junta medica en el hospital y ahí esperar a ver si nos otorgan el “famoso certificado”, esa es la única manera que la medicina pre-paga cubra el 100% de todos los tratamientos que la gorda necesita para poder re-insertarse en este “mundo”.
Un mundo donde a los largo de estos días, me pregunte una y otra vez, si valía la pena tratar de llegar a entender.
Puertas que se cerraron de golpe, idas y venidas intentando encontrar un lugar para ella, mi hermosa hija que tiene todo el derecho del mundo como cualquier nena de dos años y siete meses a asistir a un jardín, pero como ella necesita ir con su maestra integradora, esto parece ser algo muy difícil.
Decepciones, re-planteos que todavía no tuve tiempo de hacer. Porque se imaginaran lo que tuve que correr para poder conseguir una vacante en pleno comienzo del ciclo escolar. Ya que en el jardin donde estaba anotada no la “Aceptaban” . Y si encima mandaba a la mierda a la Directora cuando me dijo directamente y bien clarito “este no es el colegio para tu HIJA”, doble problema hubiera tenido si además necesitaba encontrar una vacante para Tiago también.
Nuestra vida dio un giro de 180 grados, demasiados cambios juntos y muy movilizadotes, nunca creí que mi hija iba a enseñarme tanto. Amo a mi hija mas que nada en este mundo, Uno proyecta, desea, imagina… pero lo más importante que es sean felices. Y no tengo ninguna duda que es una nena FELIZ.
tal vez deberé aprender que la gorda necesitara retroceder un paso para avanzar dos, pero lo importante es que avance, ella no puede comunicarse, casi no tiene “Intención” y si a eso le sumamos un trastorno en el lenguaje, (algo muy común de encontrar en este tipo de cuadros) todo parece ser mas difícil de poder solucionar porque no solo NO puede hablar, sino que tampoco comprende lo que le decimos con palabras y se queda perdida dentro de "su mundo"
Tenemos por delante un gran trabajo, un equipo maravilloso que esta junto a ella y le enseñan día a día con mucho amor y paciencia como aprender a “ACEPTAR” este mundo, el tratamiento es intensivo y continuo, es de la única manera que se obtienen resultados. Vamos a la fonoaudiologa cuatro veces por semana y cinco veces por semana también tiene su terapeuta cognitivo conductual.
Algunas tardes la veo cansada, es una gran exigencia para ella, pero sabe que estamos los cuatro JUNTOS ayudándola a crecer, intentando que en unos años, esto sea un mal recuerdo y emocionándonos con cada logro, porque en estos dos meses de tratamiento aprendió a decir MA, PA y TAGO.
Así nos llama, así intenta comunicarse, así nos enseña que algunas cosas cuestan mas esfuerzo, pero cuando escucho esa vocecita tan dulce siento que no puedo estar triste, que no debo bajar los brazos y que tengo que luchar lo que sea necesario porque ella se lo merece, porque ser MAMA DE SIGAL es lo mas lindo que me paso en mi vida.